La convivencia entre personas mayores y estudiantes universitarios en una situación de alquiler puede tener varios beneficios para ambas partes. Algunos de los beneficios son:

1. Compañía y apoyo emocional: La convivencia puede proporcionar compañía y apoyo emocional tanto a las personas mayores como a los estudiantes universitarios. Las personas mayores pueden disfrutar de la presencia de jóvenes estudiantes, lo cual puede ayudarles a combatir la soledad y el aislamiento social, mientras que los estudiantes universitarios pueden beneficiarse de la experiencia de vida y la sabiduría de las personas mayores.

2. Ayuda con tareas del hogar: Las personas mayores pueden tener dificultades para realizar algunas tareas del hogar debido a su edad o salud, como la limpieza, la cocina o el mantenimiento del jardín. Los estudiantes universitarios pueden ofrecer su ayuda con estas tareas a cambio del alquiler, lo cual puede aliviar la carga de trabajo de las personas mayores y permitirles vivir de manera más cómoda y segura en su hogar.

3. Intercambio de conocimientos: La convivencia entre personas mayores y estudiantes universitarios también puede fomentar el intercambio de conocimientos. Las personas mayores pueden compartir su experiencia de vida, consejos y habilidades prácticas con los estudiantes universitarios, mientras que éstos pueden aportar conocimientos y habilidades en áreas como la tecnología, las redes sociales o el idioma inglés, por ejemplo. Esto puede crear un ambiente enriquecedor donde ambas partes aprenden y se benefician mutuamente.

4. Reducción de costos: El alquiler compartido entre personas mayores y estudiantes universitarios puede ser una forma efectiva de reducir los costos de vivienda para ambas partes. Las personas mayores pueden beneficiarse de un ingreso adicional a través del alquiler de una habitación o espacio en su hogar, lo cual puede ayudarles a afrontar los gastos de vivienda y otros gastos cotidianos. Por otro lado, los estudiantes universitarios pueden encontrar una opción de vivienda más asequible en comparación con el alquiler de un apartamento o dormitorio universitario.

5. Creación de conexiones intergeneracionales: La convivencia entre personas mayores y estudiantes universitarios puede promover la creación de conexiones intergeneracionales significativas. Ambas partes pueden aprender de la perspectiva y la experiencia del otro, lo cual puede enriquecer sus vidas y crear lazos emocionales fuertes. Además, estas conexiones intergeneracionales pueden contribuir a una mayor comprensión y aprecio entre diferentes generaciones, fomentando la tolerancia y la empatía hacia las personas de diferentes edades.

He sido estudiantes durante cuatro años y soy consciente de lo dificil que puede llegar a ser encontrar un piso en condiciones y que sea asequible. Además como he mencionado anteriormente la soledad es muy dura para las personas mayores. 

¿Que opinaís vosotros?